Dirección Médica Hospitalaria

En el contexto de la dirección hospitalaria, los conocimientos derivan de dos fuentes principales: la investigación sobre servicios de salud y la investigación sobre prácticas de gerenciamiento. La primera incluye un creciente campo de innovaciones en programas y prácticas de gestión de servicios de salud. Ha mostrado una notable expansión recientemente, pero no se ha desprendido de sus falencias más importantes: su orientación cuasi clínica, con un foco casi exclusivo en la medición de resultados clínicos y otros indicadores de desempeño, sin atención a conceptos e instrumentos clave derivados de las ciencias sociales. Por ejemplo, los estudios en este campo a menudo miden el impacto de intervenciones e innovaciones puntuales con métodos cuasi experimentales que imitan la lógica de los ensayos clínicos, sin evaluar ni analizar la influencia de los contextos organizacionales en los que han de operar esas innovaciones.

La segunda rama de conocimientos, derivada de la administración de empresas, también ha ganado relevancia en la dirección hospitalaria. Eso ocurrió primero en sistemas de salud más orientados al mercado, como el estadounidense, pero su influencia se expande ahora también a otros como el NHS inglés. Consiste en modelos, conceptos y programas de cambio organizacional a gran escala nacidos en el sector empresarial privado y exportados más tarde al sector salud; incluye un historial de conceptos más o menos de moda que van desde los programas de cambio cultural de Peters y Waterman hasta los sistemas de producción Lean promovidos recientemente en el sistema inglés, el estadounidense y el canadiense. Tienen una cierta utilidad potencial pero no suelen fundarse en bases académicas, no adoptan el formato típico de la investigación científica, se orientan principalmente al rendimiento, consideran a médicos y otros profesionales principalmente como obstáculos al cambio, y son metodológicamente opacos.

La evidencia demuestra que existe una mejor forma de generar y presentar conocimientos en el contexto de la dirección médica hospitalaria. Para ser eficaz, la misma debe extraer los puntos fuertes de las dos corrientes mencionadas y evitar sus aspectos negativos o insuficientes. Debe conservar y acrecentar el rigor analítico pero al mismo tiempo ser práctica y maleable para de ese modo aplicarse con éxito a la realidad de las organizaciones hospitalarias. Debe también facilitar el acceso a innovaciones sostenibles pero evitando las modas y tópicos tan frecuentes en la literatura empresarial. Una nueva corriente de información para dirección hospitalaria sigue esa vía; el estudio que presentamos busca nutrirse de ella y reflejar sus principios.

El trabajo incluye conceptos avanzados y estrategias innovadoras para el manejo eficaz de las relaciones interprofesionales, la comunicación, la gestión de la performance, la transparencia, las responsabilidades, el trabajo en equipo, la evaluación de la información, la conectividad, la expresión de propósitos, el desarrollo de capacidades, la motivación de la conducta médica, la adopción de innovaciones, la influencia social, los procesos de socialización, y los perfiles de conducta médica. También aborda aspectos conceptuales y metodológicos sobre el liderazgo, incluyendo dimensiones como liderazgo basado en la práctica, liderazgo plural, liderazgo compartido, liderazgo en pool, liderazgo extendido, y liderazgo para la producción. El resultado es un avanzado recurso para dar respuestas eficaces y proactivas a los desafíos actuales de la dirección médica hospitalaria.

Formato: Impreso + Digital